«

»

ARGENTINA: LA ECONOMÍA DE MACRI

COMCOSUR INFORMA AÑO 16 – No. 1747 – jueves 04.08.2016
COMUNICACIÓN PARTICIPATIVA DESDE EL CONO SUR
1994 – 19 de junio – 2016 – 22 años
Selección y producción: Beatriz Alonso, Henry Flores y Carlos Casares
Apoyo técnico: Carlos Dárdano
Colaboran:
ALEMANIA: Antje Vieth y Carlos Ramos (Berlín)
ARGENTINA: Eduardo Abeleira, Claudia Korol y Mauricio D’ambrouso (Buenos Aires)
BRASIL: Carlos O. Catalogne (Florianópolis)
CENTROAMÉRICA: Gustavo González
ECUADOR: Kintto Lucas (Quito)
HOLANDA: Ramón Haniotis (Amsterdam)
SUIZA: Sergio Ferrari (Berna)
URUGUAY: Jorge Marrero (Santa Rosa), Margarita Merklen (Durazno), Pablo Alfano (Montevideo), Luis Sabini (Piriápolis)
________

 

 

“Todas las estructuras del poder popular que estábamos construyendo se hicieron presentes, tomaron voz, en una radio que no quería tanto hablarle al pueblo. Quería que el pueblo hablara.” RADIO VENCEREMOS
________

NOTICIAS Y TEMAS DE COMCOSUR

1) ARGENTINA: LA ECONOMÍA DE MACRI
Seis meses de gestión confirman que Macri implementa un ajuste neoliberal para transferir ingresos de los trabajadores a los capitalistas. /Claudio Katz

2) EL SALVADOR: VIVIENDA POR AYUDA MUTUA
Se construirán 440 apartamentos mediante nueva modalidad de ayuda mutua. /Maribel Montenegro

3) UNA NICARAGUA DISTINTA, UN SANDINISMO “AGGIORNADO”
La Nicaragua de hoy es distinta a los años 80, aquellos en que la Revolución Popular Sandinista provocó una enorme efervescencia social interna. /Sergio Ferrari,

4) LA PRESIDENCIA DEL MERCOSUR
Argentina y Paraguay no reconocen a Venezuela en la presidencia del Mercosur. /João Flores da Cunha

5) CELULOSA Y ESPEJITOS DE COLORES
El gobierno bate el parche y aplaude la supuesta instalación de una tercera gran planta de celulosa en las márgenes del Río Negro. Diversos titulares de prensa en gran destaque se suman a la claque. /José A. Rocca
________

NOTICIAS Y TEMAS DE COMCOSUR

1) ARGENTINA: LA ECONOMÍA DE MACRI

Seis meses de gestión confirman que Macri implementa un ajuste neoliberal para transferir ingresos de los trabajadores a los capitalistas.

Por Claudio Katz

Esta agresión genera resistencias populares y crecientes desequilibrios, en un marco económico adverso que induce al gobierno a ensayar virajes.

Mientras prioriza la aprobación de leyes regresivas, retoma el gasto público, convalida el déficit fiscal y atenúa el apriete recesivo. ¿Cuáles son los sectores más beneficiados de la clase dominante? ¿Llegará la anunciada reactivación? ¿En qué se asemeja el modelo actual al menemismo?

“Trabajo sucio”

La fuerte devaluación combinada con recortes de impuestos a los exportadores provocó la mayor escalada inflacionaria desde la catástrofe del 2001. El gobierno ya archivó su cálculo inicial del 25% y estima una carestía anual del 42%. Los formadores de precios se enriquecieron de inmediato con el empobrecimiento del grueso de la población.

En un rapto de sinceridad el ministro Prat Gay reconoció que el gobierno comandó ese “trabajo sucio”, eliminando todos los controles de precios. En los primeros 90 días de gestión se verificaron los efectos de esa agresión con la abrupta generación de 1,4 millones de nuevos pobres. Al concluir el segundo trimestre hay estimaciones que duplican esa cifra.

Los despidos comenzaron con la paralización de la obra pública, la purga de contratados por el estado y el veto presidencial a una ley que limitaba las cesantías. Se buscó generalizar el temor al desempleo para precarizar el trabajo y forzar caídas del salario en las negociaciones paritarias. Por eso se promocionó un convenio de “primer empleo” suscripto con Mc Donalds que establece sueldos inferiores al salario mínimo.

Posteriormente llegaron los tarifazos. Las facturas a los hogares incluyen aumentos del 400%-1800%, en los pequeños comercios las boletas se multiplicaron por cinco y en ciertas industrias por trece. Las tarifas sociales se otorgan con cuentagotas y excluyen a la inmensa mayoría de los afectados.

Los porcentuales del tarifazo son arbitrarios y no siguen ninguna lógica de costos. Favorecen a las empresas que transformaron a sus directivos en ministros, para obtener ganancias impensables en otros países. La nafta sube en pleno abaratamiento del precio internacional del petróleo y las compañías de electricidad, agua o transporte fijan sus precios sin ningún compromiso de inversión.

Los tarifazos no corrigen anomalías de los subsidios precedentes.

El kirchnerismo subvencionaba a las empresas para mantener precios reducidos de los servicios y el macrismo enriquece al mismo sector autorizando los aumentos. Nadie revisa el manejo de ese dinero, ni penaliza la ausencia de inversiones o la violación de los contratos.

La brutalidad de los ajustes en curso no es sinónimo de efectividad. Al contrario, los desequilibrios creados por los Ceócratas del gabinete desbordaron todo lo previsto. La inflación se disparó generando un desplome del consumo que acentúa la recesión y los números del primer semestre son aterradores. El año cerraría con una caída del 2% del PBI.

Cómo la única receta antiinflacionaria que improvisó el gobierno fue la contracción de la emisión y el aumento de las tasas de interés, la retracción del nivel de actividad se acentúa, junto a la inconveniencia de cualquier inversión productiva. Ninguna operación compite con la rentabilidad del casino financiero.

Tampoco apareció la prometida lluvia de dólares para morigerar el ajuste. Los ingresos de divisas no compensan las salidas y las reservas del Banco Central se ubican en un nivel semejante al dejado por Cristina. Sólo arriban capitales golondrina, para aprovechar la combinación del dólar planchado con los altos rendimientos de los títulos públicos en pesos. Los anuncios oficiales de inversión extranjera simplemente enmascaran proyectos anteriores ya difundidos

Todo el establishment apoya a Macri pero los capitalistas nunca invierten por simple afinidad con un gobierno. Evalúan el futuro de sus negocios y por ahora sólo las actividades primarias y financieras prometen altas ganancias.

Resistencias y pragmatismo

La resistencia popular ha impuesto un serio límite al ajuste. Desde su asunción Macri ha enfrentado paros y movilizaciones, que iniciaron los estatales y continuaron otros sectores. En algunas regiones de la Patagonia esa acción alcanzó gran masividad.

Por eso el mensaje inicial del gobierno contra los “ñoquis” y la militancia ha perdido peso y se frenó la avalancha de despidos en el estado. Bullrich continúa ensayando medidas represivas, pero no pudo aplicar el protocolo anti-piquetes contra los manifestantes.

Los talibanes del macrismo (Broda, Espert) exhiben su descontento con esa impotencia. Cuestionan la decisión oficial de posponer el plan de guerra contra los empleados públicos. Macri no se atreve a comenzar el despido de un millón y medio de trabajadores estatales, ni su conversión en perceptores de la asignación universal.

También hay retrocesos del gobierno frente a las protestas contra el tarifazo.

En varias provincias y municipios rigen cautelares dispuestas por jueces que perciben el malhumor social. Mientras despunta cierto caos en el sistema de facturación, los funcionarios disimulan su fracaso alegando humildad o aprendizaje.

El resultado final de la pulseada en curso se observará en el cierre de las paritarias. Los salarios perderán frente a la inflación, pero en porcentuales muy inferiores a lo ambicionado por el macrismo. En este terreno, el fracaso del gobierno constituye una excelente noticias para la población.

La estrategia gubernamental-patronal para abaratar los salarios afronta serios escollos. La presión por abajo impuso la realización del mayor acto sindical conjunto de las últimas décadas, en un contexto de alto nivel de afiliación y militancia en los gremios. Sólo la desmovilización que impuso la burocracia de la CGT salvó a Macri de una explícita derrota en las calles.

Además, las multitudinarias movilizaciones estudiantiles y docentes reavivaron el fantasma del desplome sufrido por la Alianza, cuando López Murphy intentó un recorte de la inversión educativa.

Frente a este convulsivo escenario Macri ha optado por un afloje del ajuste. La obsesión por reducir el déficit fiscal se diluye y los funcionarios ya avalan un desbalance semejante a la gestión anterior. Acordaron con las provincias liberar los fondos retenidos de la coparticipación, reactivan las obras públicas congeladas y conceden cierta reducción de impuestos a las PYMES.

Al gobierno no le queda otro camino para revertir la recesión. Cómo el publicitado segundo semestre ya comenzó sin ningún indicio de reactivación, Prat Gay ensancha la canilla del endeudamiento para financiar el gasto corriente. Intenta apuntalar el nivel de actividad con los artificios que anteriormente objetaba al “populismo”.

Macri tiene en la mira las elecciones del 2017 y se apresta a relanzar el consumo, con el mismo mecanismo de gasto público y dólar acordonando que utilizaron sus antecesores. La única diferencia con el kirchnerismo es la financiación de ese procedimiento: sustituyó la emisión por el endeudamiento. Ahora apuesta a consolidar en los comicios una fuerza política derechista, con el objetivo de intentar un mayor ajuste dentro de dos años.

Leyes estratégicas

Macri también se repliega en la coyuntura para apuntalar una estrategia legislativa, que requiere el auxilio de los renovadores y el PJ. El bloque de Massa disfraza con caras de enojo su sostén a los proyectos claves de la clase dominante.

La ley de pago a los buitres fue el arranque de esa andanada. Se firmó todo lo que Singer exigió durante años. Los fondos obtuvieron ganancias siderales cobrando 4 dólares por títulos comprados a 25 centavos. Lograron la emisión del bono exigido por cada tenedor en las distintas variedades jurídicas (fallos a favor, sin sentencia, litigio en otras jurisdicciones).

El Parlamento repitió todos los precedentes de entrega del país a los financistas. Avaló la mayor colocación de deuda reciente de una economía intermedia, sin obtener a cambio ningún dólar fresco para proyectos productivos. De los 16.500 millones de dólares emitidos, 9300 millones fueron directamente transferidos a los buitres. El resto se utilizará para financiar el gasto corriente.

La tasa promedio de los títulos (7,2%) supera varias veces el promedio internacional e impone una pesada carga de intereses. El aluvión de dólares que desataría ese arreglo no aparece en ningún mercado y tampoco se verifica un significativo abaratamiento del endeudamiento ulterior.

La deuda pública ha trepado del 17% al 23,5%. Cómo ese porcentual continúa por debajo del promedio regional los bancos buscan ampliar la hipoteca. Por eso vía mejoran sustancialmente sus balances.

El Congreso también aprobó el blanqueo de capitales que Macri disfrazó con promesas de mejoras para los jubilados. Empaquetó en un paquete único varias leyes inconexas. Senadores y diputados se sumaron a la maniobra presidencial y hablaron durante semanas de los jubilados, para ocultar el premio otorgado a los grandes evasores.

Sólo con el tiempo se sabrá cuánto dinero obtendrá realmente el sector pasivo. Quiénes cuentan con sentencias firmes de lo adeudado por el estado podrían cobrar sus demandas. Pero el resto debería conformarse con una quita y el pago en cuotas, a cambio de renunciar al juicio. El alcance de esa poda dependerá, a su vez, de los índices de ajuste utilizados para calcular el pasivo. Macri inaugura un nuevo capítulo de las incontables trampas que han sufrido los jubilados.

El propósito oficial es vaciar el Fondo de Garantía -que sostiene al sistema previsional- para retomar su privatización. Si buscaran cumplir con las sentencias sin demoler ese resguardo, deberían primero recapitalizar el sostén financiero del sistema. Esa reconstitución podría efectivizarse restaurando las contribuciones patronales eliminadas por Cavallo. Sin esos aportes el ANSES perderá solvencia y en algún momento reaparecerá la exigencia de sustituir el régimen colectivo de reparto por un sistema individual de capitalización.

Es evidente que el blanqueo no servirá para pagar las sentencias pendientes. En la hipótesis oficial ese jolgorio aportaría al estado unos 2000 millones de dólares, que cubrirían apenas la tercera parte del costo inicial del gasto comprometido con el sector pasivo.

El quebranto adrede del ANSES apunta a justificar también la venta de acciones privadas que acumula ese organismo. Los capitalistas quieren recuperar esos papeles para sacarse de encima el control estatal de sus balances. Más que una reparación a los jubilados, el Parlamento aseguró otra retribución a los grandes grupos empresarios.

El gobierno declara la “emergencia previsional” con un propósito de mediano plazo. Busca quebrantar el ahorro de los jubilados para reformar todo el sistema, segmentando los haberes en nuevas categorías y aumentando la edad para acceder al cobro.

El desinterés oficial por la solvencia del Fondo del Garantía se verifica, además, en la flexibilidad del blanqueo. Los evasores pueden declarar sus fortunas manteniendo el dinero en el exterior y quiénes decidan ingresarlo recibirán penalidades irrisorias. Incluso podrán cancelar esos compromisos adquiriendo títulos públicos.

El blanqueo es un conocido fraude que por enésima vez se realiza proclamando la ausencia de “otra oportunidad”. El mismo discurso fue enunciado en 1987, 1992, 2008 y 2013. El kirchnerismo incluso introdujo una variante extrema de auto-prórroga indefinida de ese perdón.

Los CEOs del gabinete promueven la legalización de una parte del dinero oculto en los paraísos fiscales. Esas divisas blanqueadas serán presentadas como la esperada lluvia de dólares genuinos. Lo que inicialmente arribaría por simple confianza, finalmente aterrizará a cambio del perdón fiscal.

El Parlamento no sólo autorizó esa estafa. También abrió los grifos para una reforma impositiva regresiva, mediante la reducción (y posterior eliminación) del gravamen a los bienes personales. Mientras demora la revisión del impuesto a las ganancias que tributan los asalariados, reduce la cobranza entre los sectores más acomodados.

Ganadores y escenarios

Macri gobierna para los sectores capitalistas que reclamaron la devaluación, pero su gestión ha roto el equilibrio entre las finanzas, el agro y la industria.

Los banqueros son los principales beneficiarios. Lucran con el blanqueo, el endeudamiento externo y las ganancias obtenidas con los contratos de dólar futuro concertados con la administración saliente del Banco Central.

También embolsan fortunas colocando dinero en los títulos que el BCRA emite a tasas exorbitantes (Lebacs). El agujero fiscal que genera esa bicicleta es mucho mayor que los seguros de cambio legados por el kirchnerismo.

Hay por lo menos 27 financistas en altos cargos del gobierno. La mayoría se adiestró en Wall Street y responde a bancos internacionales que desplazaron a sus pares locales. Este predominio se afianzará cuando el país reingrese a las auditorias del FMI.

Sólo las empresas mineras foráneas compiten con las ventajas otorgadas a los banqueros. Esas compañías obtuvieron una disminución adicional de los insignificantes impuestos que pagaron durante la década pasada y preparan un despojo en gran escala del litio.

El balance del primer semestre para el agro-negocio es más contradictorio. Por un lado logró una inédita combinación de devaluación con reducción de las retenciones. Este beneficio explica la liquidación de granos retenidos y el incremento de la superficie sembrada, en un marco de menor declive internacional del precio de la soja.

Pero un gran conflicto comienza a despuntar con la apreciación del tipo de cambio que generó la inflación. Las ganancias obtenidas con la devaluación tienden a licuarse por el encarecimiento de costos que produce esa carestía.

Los agro-exportadores apuntalan el giro internacional de Macri hacia la Alianza del Pacífico con la intención de incursionar en nuevos mercados.

Pero esos convenios de libre comercio también contienen adversidades, como el pago de mayores patentes a los grandes proveedores de semillas (Monsanto).

Además, la extranjerización de tierras que impulsa el gobierno involucra otro conflicto con el agro-negocio local. Ya hay voces cuestionando la gravitación de los fondos off shore, que controlan 1 de cada 16 hectáreas de los campos argentinos.

Pero el principal frente de tormenta del oficialismo se localiza en el área industrial. Este sector acompaña todos los atropellos contra los trabajadores, pero ha quedado muy afectado por la demolición del mercado interno.

Algunos industriales esperaban compensar la caída de las ventas locales con mayores exportaciones, pero la recesión de Brasil y la nueva apreciación del tipo de cambio bloquea ese atenuante. El dólar planchado deteriora seriamente la competitividad de los empresarios fabriles.

Para colmo, esos grupos afrontan un gran encarecimiento de costos por los tarifazos y los aumentos de las tasas de interés. Ninguna inversión industrial puede rivalizar actualmente con el negocio de inmovilizar dinero en los bancos. Prat Gay no sólo recurrió al encarecimiento del crédito para contener la inflación. También autorizó importaciones de bienes de consumo que demuelen a los fabricantes locales. El coqueteo con la Alianza del Pacifico (y la consiguiente eliminación de aranceles) amenaza la supervivencia de ese sector.

Las tensiones del gobierno con los industriales podrían atenuarse, si Macri reafirma su viraje hacia un ciclo de consumo sostenido en endeudamiento. Pero esa tregua no eliminará las enormes contradicciones del curso actual.

Comparaciones e incógnitas

El primer semestre de Macri presenta grandes semejanzas con la transferencia regresiva de ingresos que rigió durante el menemismo. Se repite un modelo de cirugía neoliberal financiada con endeudamiento, déficit fiscal y favoritismo hacia el capital financiero.

Mientras comienza a recrearse la apertura importadora de los 90, el arreglo con los buitres se parece al mega-canje de Cavallo. Las analogías se extienden incluso a la forma de enmascarar las leyes anti-populares con fantasías de mejoras para los empobrecidos.

Macri sanciona el blanqueo con la misma utilización de los jubilados que ensayó Menen para privatizar YPF. También repite la gestión aventurera de las cuentas públicas, con anuncios de pagos que dependen de un dinero a recaudar. Si esos fondos no llegan recurrirá al mismo endeudamiento que destruyó las finanzas del estado.

Como su antecesor Macri debutó con un gabinete de gerentes y su Ceocracia repite la cesión del ministerio de economía a Bunge y Born. El justicialismo apoya las mismas leyes reaccionarias que apuntaló bajo el menemismo y la burocracia sindical otorga las mismas treguas a cambio de prebendas.

Las semejanzas se extienden al plano discursivo. Prat Gay pide perdón a los estafadores españoles de RESPOL o Aerolíneas, con la misma sumisión colonial que enorgullecía a los funcionarios de Menen. Hasta la retórica corriente del gobierno (“estamos saliendo del túnel”) se parece a las frases célebres del riojano ("estamos mal, pero vamos bien").

Macri copia la estrategia de combinar el ajuste con la reactivación y el endeudamiento para sortear los escollos electorales. Pero afronta más dificultades que Menen para estabilizar un modelo neoliberal. No gobierna en la euforia privatista de los 90. Navega en una oleada regional derechista sin sustento propio para imponer políticas anti-obreras.

El líder del PRO tampoco cuenta con los recuerdos del trauma híper inflacionario que facilitaron los atropellos del menemismo. No asumió en escenarios de colapso y debe lidiar con la memoria opuesta de un largo ciclo de consumo. Ni siquiera puede atribuir la ausencia de resultados a la adversidad internacional. Macri socavó ese recurso al propagar anuncios de grandes oportunidades mundiales para Argentina.

El relato oficial achacando todas las desventuras del primer semestre a la “herencia” kirchnerista pierde credibilidad. Salta a la vista que todos los desequilibrios de la gestión anterior han sido acentuados por el macrismo.

El apoyo que recibe de los economistas de Scioli (Bein, Blejer, Marangoni) sólo disfraza ese agravamiento, mientras confirma que tenían en carpeta un programa muy semejante.

El segundo semestre develará las incógnitas de la coyuntura e indicará qué grado de viabilidad tiene la restauración conservadora. Si la resistencia social logra desbaratar esa agresión quedará nuevamente abierto un camino favorable para la mayoría popular. Construir una política que frene los atropellos de Macri sin volver al desengaño kirchnerista es la gran apuesta del momento.

Claudio Katz /Enviado por Fernando Zerboni
COMCOSUR INFORMA Nº 1747 – 04/08/2016
__________

2) EL SALVADOR: VIVIENDA POR AYUDA MUTUA

Se construirán 440 apartamentos mediante nueva modalidad de ayuda mutua.

Maribel Montenegro /Habitat International Coalition – América Latina El Salvador, Agosto 2016

La falta de tierras para la construcción de nuevas viviendas es un problema que por años ha estado afectando al país, principalmente en San Salvador, por lo que el Gobierno le apuesta a la construcción de complejos habitacionales en el Centro Histórico.

Por hoy son 440 apartamentos que se piensan construir mediante una nueva modalidad de “ayuda mutua” y bajo el esquema de una cooperativa, dijo Roberto Góchez, viceministro de Vivienda y Desarrollo Urbano.

Explicó que serán los mismos habitantes de las unidades habitacionales quienes construyan la vivienda, pero está no será de su propiedad, “la vivienda nunca se la traspasa de manera individual a la persona, las viviendas son de la cooperativa”, por lo tanto no se pueden vender, no están sujetas a embargos judiciales, ya que son viviendas colectivas.

El modelo de “viviendas cooperativas es autogestionable”, por lo que el Gobierno ha pensado en que el aporte mensual que den los cooperativistas sirva para crear un “fondo rotatorio para la construcción de más viviendas”, ya que el financiamiento para la construcción es uno de los temas más álgidos “para ello se necesitan fondos, pero el Estado no puede aportarlo”, sostuvo, por lo que dijo que se necesitan fuentes de financiamiento propias, principalmente para favorecer a las familias de bajos ingresos.

Para la ejecución del proyecto, que se está ejecutando con fondos provenientes de un préstamo que ha hecho el Gobierno de Italia, ya se tienen tres terrenos ubicados en distintos puntos de la capital, con lo cual también se pretende contribuir al rescate del Centro Histórico.

El funcionario brindó estas declaraciones durante la presentación de un informe de las instituciones del Sector vivienda que afirma que de junio de 2015 a mayo del 2016 se han beneficiado a 32,373 familias con una inversión de $216.41 millones.

Maribel Montenegro /Habitat International Coalition – América Latina
COMCOSUR INFORMA Nº 1747 – 04/08/2016
__________

3) UNA NICARAGUA DISTINTA, UN SANDINISMO “AGGIORNADO”

La Nicaragua de hoy es distinta a los años 80, aquellos en que la Revolución Popular Sandinista provocó una enorme efervescencia social interna.

Por Sergio Ferrari, Comentario de regreso de Nicaragua

Y logró convocar una no menos intensa solidaridad internacional hoy sumamente reducida, en todo caso en la mayor parte de los países europeos y latinoamericanos.

Entre 1979 –toma insurreccional del poder- y 1990 – derrota electoral-, el Gobierno revolucionario impulsó un proceso de reconstrucción nacional que fue torpedeado desde la Casa Blanca con una guerra de agresión. El saldo fue dramático para un país que entonces no llegaba a los 5 millones de habitantes: más de 40 mil víctimas y no menos de 17 mil millones de dólares en pérdidas, según datos del Tribunal Internacional de La Haya, es decir el equivalente de casi 50 años de exportaciones a los valores de 1980.

Revolución y contrarrevolución; reconstrucción vs guerra de agresión, fueron en esa década los parámetros políticos de una Nicaragua condicionada por un escenario mundial bipolar y de guerra fría.

Luego de 17 años con tres gobiernos sucesivos de neto corte neoliberal, el sandinismo volvió al Gobierno en enero del 2007. Inició allí lo que su dirigencia caracteriza como la “2da etapa de la revolución”, definida como “cristiana, socialista y solidaria”.

Para el Gobierno la estrategia principal hoy es la “lucha contra la pobreza”, en el marco de una política de “reconciliación nacional” que ha llevado al sandinismo a negociar con la jerarquía de la Iglesia Católica (e importantes sectores evangélicos) y con sectores pudientes del empresariado. “Al país lo sacamos adelante entre todos o se convierte en una nación inviable”, afirmaba un importante dirigente sandinista en una reciente entrevista realizada en Managua. El mismo subrayaba la intención de convertir a cada “beneficiario” de los numerosos programas sociales oficiales en “protagonistas-actores” de este proceso en marcha.

Es evidente que Nicaragua no quiere volver a vivir la guerra ni la tensión interna. El pueblo nicaragüense ya puso sobre la gran mesa de la historia de la humanidad su aporte desmesuradamente grande de combates, lucha armada, insurrección, guerra de defensa, sangre, dolor, lágrimas y coraje.

Gran parte del nuevo lenguaje un tanto esotérico de algunos de sus dirigentes – no siempre fácil a comprender con la lógica que predomina en la vida política europea o en el racionalismo analítico intelectual- busca, esencialmente, reforzar la paz y la reconciliación. Y mejorar las condiciones de vida del pueblo nica.

Y esos valores de paz –reconciliación, se los han apropiado incluso importantes grupos de la juventud, que aparece como el sector más dinámico – en particular las jóvenes mujeres- de apoyo al sandinismo. Sin embargo, una juventud, que según incluso militantes históricos, tiene hoy menos formación política e ideológica que en los años ochenta. Lo que puede anticipar una fragilidad a largo plazo para el partido en el Gobierno en caso de no revertir esta tendencia. Partido que, paradójicamente, a pesar de esa participación juvenil, no parece plantearse el tema de la renovación generacional de la máxima dirigencia. Daniel Ortega, será de nuevo candidato a presidente para proseguir por cuatro años más al frente de la gestión de Estado si gana las elecciones del próximo 6 de noviembre.

No faltan las críticas de parte de una oposición extremadamente debilitada – y del periódico derechista La Prensa- sobre la fuerte presencia de la familia Ortega en la gestión del Estado. Y sobre hechos de corrupción que golpean ámbitos de la gestión gubernamental. La corrupción es una acusación penetrante. La dirigencia sandinista asegurar controlarla institucionalmente, pero no la tematiza públicamente. Es casi un tabú en la agenda cotidiana.

Nicaragua 2016. Continuidad de los 80 en gran parte. Diferente en muchos aspectos: mejores rutas interurbanas en todo el país; electrificación al acceso de la mano; salud y educación gratuitas; una Managua esotéricamente iluminada con árboles de vida artificiales gigantes; acceso al consumo instalado. Y donde el sandinismo aggiornado, electoral, institucionalizado, se expresa como una fuerza “pragmática” responsable de dirigir un Estado sin renunciar a su discurso antiimperialista.

Promoviendo alianzas regionales como el ALBA y reforzando el polo progresista en una Latinoamérica que enfrenta hoy una nueva contraofensiva anti-popular, si se tiene en cuenta el golpe parlamentario en Brasil o la victoria electoral del proyecto neoliberal salvaje de Macri en Argentina.

Nicaragua es distinta. Nada ni nadie es igual 40 años después…Con un nuevo sandinismo donde el plan nacional prevalece hoy sobre los ideales socialistas de sus orígenes. Y donde las consignas combativas de los 80 dejan lugar a directivas precisas de desarrollo (“paz y trabajo”) en uno de los países más empobrecidos de nuestra América.

Sergio Ferrari, Suiza (Comentario)
COMCOSUR INFORMA Nº 1747 – 04/08/2016
__________

4) LA PRESIDENCIA DEL MERCOSUR

Argentina y Paraguay no reconocen a Venezuela en la presidencia del Mercosur

Por João Flores da Cunha / IHU – Unisinos / Agencia Boliviana de Información /Adital, 02.08.2016

Uruguay dejó la presidencia temporal del Mercosur el 29-07-2016. Venezuela, que de acuerdo con la reglas de sucesión debería asumirla, anunció al día siguiente que está en el ejercicio de la presidencia. Sin embargo, los otros países del Mercosur no reconocieron el acto. La situación inusitada evidencia un impasse al interno del bloque.

El canciller del Paraguay, Eladio Loizaga, dijo que el país no reconoce a Venezuela como líder de la organización. Afirmó que se trata de una presidencia de facto. El diario argentino Clarín, citando como fuente la presidencia del país, informó que el gobierno de Mauricio Macri tampoco va a reconocer a Venezuela como líder del bloque.

El Ministerio de Relaciones Exteriores del Brasil, que aún no se manifestó al respecto, venía mostrándose contrario a pasar la presidencia para Venezuela. Solamente Uruguay es favorable a dicho pasaje. Por medio de un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores uruguayo afirmó que "entiende que hoy por hoy no hay argumentos jurídicos que impidan el pasaje de la presidencia pro tempore a Venezuela".

Crisis prolongada

Como Uruguay dejó el liderazgo del bloque y Venezuela asumió de forma unilateral, el Mercosur está hoy efectivamente sin presidencia temporaria. El episodio es un capítulo más de una crisis que viene desde junio, cuando se acercaba el fin del período del país cisplatino al frente del bloque.

De acuerdo con la regla de sucesión que sigue el orden alfabético, Venezuela asumiría la posición en el segundo semestre del 2016. Sin embargo, Argentina, Brasil y Paraguay manifestaron sus reservas en relación a la posibilidad de que el país presidido por Nicolás Maduro lidere el bloque. Ellos citan violaciones de derechos humanos y el combate a la oposición del gobierno de Maduro.

La crisis revela una nueva línea en el Mercosur después de la elección de Mauricio Macri y el distanciamiento de Dilma Rousseff. De esta manera, Venezuela cuenta por el momento solamente con el apoyo de Uruguay, cuyo poder está en manos del Frente Amplio, partido de izquierda.

João Flores da Cunha / IHU y agencias /Adital | Traducción: Susana Rocca
COMCOSUR INFORMA Nº 1747 – 04/08/2016
__________

5) CELULOSA Y ESPEJITOS DE COLORES

El gobierno bate el parche y aplaude la supuesta instalación de una tercera gran planta de celulosa en las márgenes del Río Negro. Diversos titulares de prensa en gran destaque se suman a la claque.

Por José Antonio Rocca / Primera quincena Agosto.

La algarabía se fundamenta en declaraciones del vice presidente senior del desarrollo de negocios de la empresa finlandesa UPM en Uruguay Jaako Sarantola “Uruguay podría albergar una tercera planta de celulosa (….) si se adecuara la infraestructura logística que permita el desarrollo de emprendimientos de gran escala orientados a la exportación. Si estos desafíos pueden ser resueltos en los próximos años Uruguay podría ser una alternativa competitiva para atender las oportunidades del mercado de celulosa de UPM en la década del 2020”.

La experiencia de efectos negativos sobre la economía, la naturaleza, la sociedad de los enclaves de monocultivos forestales y de las plantas de celulosa en Uruguay (i )y en el mundo, no es obstáculo para el optimismo oficialista.

Además UPM condiciona la posibilidad de concreción de la planta de celulosa a que la infraestructura se adecue a sus requerimientos. Su planteo no es nuevo. En 2014 durante el viaje del ex presidente Mujica a Finlandia la empresa había indicado que Uruguay no poseía vías férreas, ferrocarriles, rutas, caminos, puerto acorde a sus aspiraciones. Queda claro que la exigencia de UPM implica que el costo de la red logística a su disposición correrá por cuenta y riesgo del Estado uruguayo. Sobre ese supuesto la empresa considera que Uruguay constituye una alternativa a futuro. “Se espera que hacia el final de la década del 2020 la demanda global de celulosa kraft blanqueada aumente unos 20 millones de toneladas”. (ii)

La respuesta del gobierno es de sometimiento a los intereses de la empresa. Las obras públicas tendrán por objetivo crear las condiciones para la instalación de la planta pese a la distancia entre el “podría” de las declaraciones de Saransola y la posible inversión. Una tómbola que llega al grado de que se debe apostar hasta sobre el recorrido que tendrían las vías de comunicación pues se desconoce la localización exacta de la planta en caso de concretarse.

La estrategia implica que las inversiones públicas en caminos, trenes, puerto no procuran integrar el país, abaratar los costos de transporte de alimentos para la población, acercar los niños a escuelas y liceos sino trasladar celulosa desde una empresa en zona franca hacia el puerto para su exportación. La lógica de enclave es ajena a las necesidades locales.

La propuesta viene adornada con cifras de dudoso origen. Se especula con una inversión de 1000 millones de dólares por parte del gobierno uruguayo y 4000 millones de UPM. De ser verdad una parte importante sería en maquinarias e instalaciones que traería la misma empresa. La experiencia indica que en pocos años el ingreso de capital se verá contrarrestado por la futura transferencia de ganancias al exterior. (iii) La forestal obtendrá utilidades como poseedora de tierras, productora de eucaliptus, celulosa y comercializadora de sus productos.

La obra generará algunos puestos de trabajo provisorios durante la construcción, pero también incentivará mayores plantaciones con monocultivo de eucaliptus y por lo tanto pérdida de empleo en el área rural por sustitución de actividades. El rubro es uno de los que genera menor cantidad de mano obra permanente por hectárea y la fase industrial genera ocupación muy escasa. (iv) Además la afectación del suelo, del aire, del agua provocará pérdidas de empleo en sectores como la pesca, la apicultura entre otros.

Desde el punto de vista fiscal la empresa no pagará la mayor parte de los tributos por estar en zona franca pero el sector público asumirá los costos de la logística y mantenimiento de la infraestructura.

El incremento en la producción de celulosa no se concretará en mejoras en la calidad de vida local. Al contrario los frutos de la actividad en zona franca irán al exterior. Obviamente la dinámica de la cadena depende absolutamente de factores ajenos a la realidad local. La sustitución de alimentos por eucaliptus no es buena para el país que sacrificará la calidad del agua, del suelo, del territorio. (v) De soberanía, ni hablamos.

Gotitas de economía

Un informe del Mides admite que un tercio de los uruguayos reside en viviendas con algún índice de precariedad. Más de un millón cien mil orientales habita en condiciones de hacinamiento, falta de baño o carencias en piso, techo o paredes.

El FMI y Banco Mundial elogian las políticas económicas aplicadas por el gobierno uruguayo y el ajuste fiscal. Es decir se aplauden a sí mismos.

La deuda del sector rural con el sistema financiero llega al 80% del PBI del sector según declaraciones de referentes de la Federación rural.

El frigorífico Lersinal está negociando la venta del establecimiento con una empresa china.

El índice de volumen físico de la industria según el INE descendió un 0.1% en mayo del 2016 en relación al mismo mes del año precedente. El promedio de los primeros 5 meses del año marca una caída de 0.2% que llega al 1.2% si no consideramos el sector petróleo. Las horas trabajadas disminuyeron en un 2.8 %.

El precio del dólar en la región desciende considerablemente. Expectativas de más privatizaciones y las olimpiadas en Brasil, Contracción monetaria en el cono sur, menores importaciones, aumentan la oferta y disminuyen la demanda. De todas maneras las ganancias de las empresas extranjeras, los intereses de deuda volverán a presionar en algún momento la demanda sobre el billete verde.

Informaciones europeas dan cuenta de los riesgos que sufre la Banca italiana. La valoración que realiza The Economist así lo refleja. La imagen lo gráfica.

Notas:
(i) En el libro Tierra, agua soberanía analizamos y exponemos nuestra opinión al respecto.
(ii) Palabras atribuidas por la prensa a Jaako Sarantola.
(iii) Las utilidades transferidas desde Uruguay al exterior pasaron de 218 millones de dólares en 2004 a 764 en 2009 y 1385 en 2015. Más allá que estas cifras incluyen otras empresas se evidencian el efecto de UPM y Montes del Plata.
(iv) Mucho menor que otras cadenas como por ejemplo la cárnica continuada por los frigoríficos o la triguera que deriva en molinos panaderías y fideerías, o los lácteos..
(v) La posición respecto a estos tipos de inversiones la desarrollamos en el libro Tierra, agua soberanía crónica de una entrega no anunciada.

José Antonio Rocca /La economía de a pie
COMCOSUR INFORMA Nº 1747 – 04/08/2016
__________

COMUNICACIÓN PARTICIPATIVA DESDE EL CONO SUR / COMCOSUR
Correspondencia y/o envíos: Proyectada 17 metros 5192 E (Parque Rivera)
11400 MONTEVIDEO – URUGUAY
E mail: comcosur@comcosur.com.uy
Pagina Web: nuevo.comcosur.org/
Ahora puedes seguir a Comcosur también en Facebook
Coordinación: Carlos Casares
COMCOSUR es miembro de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias – AMARC
COMCOSUR se mantiene con el trabajo voluntario de sus integrantes y no cuenta con ningún tipo de apoyo Institucional ni personal.